El profesional incompleto de nuestros días , el nuevo maestro
Observo que el vulgar proclama el derecho de ser vulgar y necesita instalar sus pensamientos en la industria que él se desarrolla: la belleza, que históricamente está industria tiene como buen gusto,respeto,profesión y resultados su bandera perdiéndola poco a poco.
Tuve Una semana de comunicaciones y actividades con maestros de la vieja escuela y también con aquellos que son hoy la renovación,muestran ambos una preocupación del gran agujero negro pedagógico que tiene como brecha a casi el 62% del mercado del sector.
Un segmento de trabajadores de la industria que su relato es: “Para que oír? Si ya tengo dentro lo que me hace falta”,sabiendo que es insuficiente para convertirse en un profesional completo pero sostiene que el mercado está vulgarizado y se suma a este tren siendo el obstáculo mayor.
El pensamiento formativo de procesos cortos y “NO” progresos continuo nos fisuro como industria y será muy complejo salir de este estamento donde el hombre mediocre se convirtió como el nuevo Adam de estos tiempos (será una cuestión política – ideológicas -social o económica) son temas a resolver por parte de las autoridades (instituciones) de cada rubro Peluqueria , Estética, Spa,Barberia por nombrar algunos de ellos.
Me preocupa que estamos solo a dos dedos de contagiarnos de vulgaridad.
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