La vida cotidiana se caracteriza por patrones repetitivos de trabajo y rutinas, en las actitudes, lenguajes, horarios y días, es como un PILOTO AUTOMÁTICO y más en una industria tan movilizarte como lo es el de la belleza puede causarnos que no alcancemos los objetivos en nuestros proyectos.
De manera inconsciente nos convertimos en soldados de lo Cotidiano, el no atreverse a modificar, el no cruzar esa línea que nos separa de lo innovador a lo clásico u ortodoxo nos aleja de que podamos convertirnos en ALGO diferente y seductor de nuestros proyectos.
¿Pero cómo sería un método de salir de lo cotidiano? Es un entrenamiento de comenzar a limpiarnos de los viejos hábitos, negarse a renunciar a algo nuevo, de atreverse a comenzar, de trazar la cancha nuevamente, de relacionarse con quienes nos motivas y de cambiar nuestros paradigmas de que TODO TIENE el mismo final.
La cotidianeidad nos teje, diariamente, una telaraña en los ojos, te invito a que las limpies y comencemos de nuevo …
ÉXITOS
Rodolfo Urrea
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