Un round más como emprendedor de belleza
Son las siete de la mañana, suena el ruido de mi despertador que interpreto como el sonido de la campana de un ring que me anuncia que comienza nuevamente un round, me llamo Gabriel soy “emprendedor certificado” con el diploma que la necesidad de la vida me proveyó, trabajando en el sector de la belleza como peluquero.
Cuando aparece ese sonido de esa campana imaginaria, me preparo físico y psicológicamente para un round más de la vida cotidiana de un emprendedor que cada vez se le hace más difícil su contrincante que son variados en esta industria que nada es imaginario, vivenciándolo de esta manera.
Suena la Campana y tengo que pelear con:
• Tengo que pelear para que mis clientes se sigan atendiendo conmigo mostrando que hay confianza
• Tengo que pelear con mi proveedor para que mantenga su honestidad
• Tengo que pelear para que mi próximo curso No sea repetitivo o improvisado por el profe de turno.
• Tengo que pelear con mi competidor que cada vez baja más los precios y enloquece al barrio.
• Tengo que pelear para mantener mi salud por estar tantas horas trabajando caso contrario No llego a fin de mes.
El ring de la vida de un emprendedor del sector de la belleza no es fácil, pero es lo que uno adopta, sabemos que la incertidumbre es lo más real que sucede, que la pasión no genera dinero, sino con técnicas y saber esperar cada oportunidad.
Existen en la industria varios Gabriel o Gabrielas que son eslabones que debemos cuidar.
Rodolfo Urrea