La identidad perdida en la industria de la peluquería
La innovación digital es el dispositivo que se incorporó en el mundo belleza, modificando sustancialmente algunos conceptos que hace unos años era impensado.
La dominación de la artística en una peluquería de los 80 creaba una categoría superior en los peluqueros que es el PEINADOR, transitando por los 90 la peluquería requería más de servicios en atención al cliente, donde el famoso RG creo la mejor escuela en este sentido donde hizo cambiar la manera de pensar el negocio a los peluqueros en su marketing personal.
En el 2000 las consumidoras de peluquería se vuelven más comerciales donde el objetivo era consumir la moda de ese momento y los peluqueros se atrevieron a romper los estereotipos y ser más transgresores con lo que ofrecían, tanto fuera como dentro de sus peluquerías, la identidad ya no era copiar lo europeo sino enfocarse a lo urbano a lo real del mercado local.
En la década de 2010 comienza la confusión entre peluqueros, técnicos de empresas y los Instructores de peluquería (que llego a más de 1000 con su franquicia que tiene como primera letra la sigla A seguido por dos letras más), en ese preciso momento comienza lo que llamo la Batalla de Roles en el mundo interno de la peluquería.
2020 la peluquería de la región ya tenía varios años con una fisura pronunciada de identidad, la complejidad de diferenciar los profesionales de los aprendices se perdió y las políticas de precios están un 60% por debajo del valor del mercado real, en esta década las redes sociales ingresan a cada peluquero de manera diferente con una generación de exceso de información como así también de exitismo.
Una identidad de la peluquería que se fisuro y algunos formadores de opinión quieren restablecerla, conocemos que debemos dejar el olor a nostalgia entendiendo que la docencia y negocio virtual tomo el 80% del mercado.
• 1980 la épica artística
• 1990 la explosión comercial de franquicias, época de oro en todos sus sentidos
• 2000 las franquicias de escuela de peluquería y el reguero de instructores de manual
• 2020 la peluquería clásica se rompió en identidad, Barberos que No son peluqueros, Maestros que son estudiantes y YouTuber con buena intención y bajo contenido intelectual.
Rodolfo Urrea