El relato insostenible del sector de la Estética
Una mirada crítica a la realidad y el contexto
La gestualidad de algunos formadores de opinión en las redes sociales (hoy por aquí todo sucede) sobre lo que comunican a los hechos reales hace más visible que NO se está pudiendo sostener algunos relatos sobre el escenario real (NO marketinero y menos de Show) en una industria de la estética que creció de manera desmedida y sin controles, donde pocos ganan y la mayoría pierde.
Los relatos que no se pueden sostener:
- Se aborda el profesional feliz en su actividad, mientras que Latinoamérica el 81% de las trabajadoras son auto gestionadas, micro emprendedoras o part time porque tienen un trabajo fijo externo, no llegando muchas veces al ingreso mínimo deseado
- Se aborda la Estética rentable, donde solo en la región un 9% gana dinero, solo un 14% recupero su inversión y gran parte de los responsables un 77% de un negocio sus ganancias reales son tres a cuatro salarios mínimos
- Se aborda una Estética segura: en los últimos 5 años las malas praxis inclusive muertes, desfiguraciones de rostros y otras secuelas instalaron como nunca en los medios masivos la torpeza de una industria que no tiene límites o al menos regulaciones serias y profesionales que la respeten.
- Se aborda el concepto de Formación profesional, interesante lo que sucede en este rubro especifico solo el 7% de las alumnas finaliza una carrera o contenido pedagógico, solo un 5% les gusta lo que están estudiando (el resto busca una salida laboral rápida) , la cantidad de escuelas se multiplicaron de manera exponencial haciendo que el mercado de alumnos se divida en cuenta gotas para cada una de las propuestas
- El crecimiento de productos caseros, casi un 44% del mercado está invadido por productos de dudosa procedencia , bajo el paragua protector de una alquimia casera, natural o consiente , donde miles de clientas utilizan alguna crema que funciona en la mejor de las suerte como un placebo
Podría detallar varias cuestiones más como eventos, congreso, asociaciones u ONG que son solo un dispositivo, más de distracción marketinera en esta industria que en algún momento supo llamarse profesional y hoy se ve involucrada en cuestiones que contaminan y confunden de los profesionales a los mercenarios.
Rodolfo Urrea