La sutil estafa
Siempre con una mirada crítica al contexto del sector de la belleza, observó una seducción permanente de instalar una realidad entre lo “bueno y lo malo” polarizando y confrontando al colectivo de trabajadores del sector de la peluquería que son clasificados de conservadores o progresistas,modernos o antiguos,nueva escuela o vieja escuela.
Siempre están las observaciones radicales como:
◦ Conscientes o irresponsables
◦ Empaticos o insensibles
◦ Generosos o egoístas
◦ Los arriesgados o los cautos
◦ Los ególatras o los monjes
◦ Los comprometidos o desapegados
◦ Los brillantes o los mediocres
◦ Los talentosos o los desahuciados
◦ Los empresarios o los trabajadores
◦ Lo correcto o lo incorrecto
◦ Siempre las diferencias son anteponiendo con una letra O en vez de una letra Y
Cuando dejamos de tener una paleta de colores en la observación y cuidado de la industria para convertirnos solo en blanco y negro haciéndolo de absoluto y radical,en un sector de la peluquería que cada vez es más generosa en oportunidades a un colectivo de profesionales que no tiene reciprocidad con esta generosidad.
A esto lo llamo una “Estafa Sutil” lo que estamos haciendo en cargar justificaciones por la falta de objetivos o competencias de un Mercado cada más duro, lo que tratamos de hacer es instalar cuestiones que son más domésticas que profesionales en el sector.
Deberíamos instalar un debate y darnos cuentas que no hay ni buenos ni malos (con algunas excepciones de algún que otro sociopata) y cuidar la industria que nos brinda lugar a todos sin distinciones de sexo,religión,edades, países.
RU
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