Yo se,tu sabes,el sabe,nosotros sabemos
La apropiación del saber llegó a su máxima expresión, una industria que tiene maestros por doquier, supuestos negocios millonarios en cada esquina de un barrio y fórmulas de negocios exitosos de aquellos que jamás tuvieron o hicieron un negocio ,es un folclore ya instalado.
El modelo del triunfador fue una gran carnada para seducir al colectivo profesional de la estética y peluqueria instalada por varias marcas comerciales que necesitan formadores de opinión (no influencer) para mantener su cartera de clientes.
Recientes encuestas realizadas a escuelas de formación de belleza sobre sus salientes alumnos dieron un resultado de tres letras: No saben nada.
El deseo de estudiar un oficio o
Profesión tiene un solo objetivo “ser alguien productivo en la vida” dice Carmen estudiante de cosmetologia, que suma al relato diciendo ,algunos venden su alma al díablo refiriéndose a tres escuelas que había transitado antes de llegar a la que llama sería en contenidos.
Las dudas a trabajar serian las siguientes: Que enseñanza se está brindando? Por qué los
Pretenciosos quieren cambiar el sistema? Que motivación existe para evitar las grandes deserciones? Cuál es el legado?
La formación en la industria de la belleza merece una discusión seria, de mi parte creo que estamos a tiempo en la
Construcción de un modelo en los próximos 10 años, para otros el escenario será difícil de modificar por qué los actores principales que son los profesionales de la vieja escuela no participan en los cambios (se cansaron)
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