Baño de realidad de la peluquería contemporánea
Como en la década del 40 la peluquería contemporánea se convirtió en una alternativa para lograr un oficio y que el mismo se convierta en algunos casos el único sostén familiar económico.
Alejados del rubio perfecto, el vedetismo o la apropiación del saber miles de mujeres en la región pueden hacer realidad su sueño de ser peluqueras haciendo trabajos en sus casas recibiendo de manera concreta ingresos (bajos) genuinos gracias al oficio aprendido que agradecen enormemente.
Desconocen nombres de maestros, formadores de opinión o las tramas verticales de una industria que esta mas dividida que nunca en el eje central (la mitad) de la pirámide por que el resto (los de arriba) y el sector que recién comienza (los de abajo) están alejados absolutamente, la BATALLA de estas mujeres no es la competencia de llevarse una medalla de plástico es algo más concreto que es ganar el dinero que les permita comprar las cuatro comidas del día.
La peluquería en estos espacios deja de ser una mala palabra siempre los ALUMNOS que comienzan, los mas necesitados y los de mas compromiso son los más agradecidos.
Rodolfo Urrea