Un Buenos Aires con clima de mas cuarentena para las peluquerías
Sin dudas la lucha de varios peluqueros empresarios, mediáticos y algunos grupos constructores de la nueva política en el sector no alcanza para convencer a las autoridades de abrir las peluquerías en un Buenos Aires que tiene sus miles de peluquerías y Barberías derrumbándose por la falta de clientes e ingresos económicos.
Un empresario del sector comento que la peluquería de barrio como la de un centro comercial ambos necesitan comenzar con la actividad unos por que tienen que cubrir los altos costos operativos (cuidar los puestos de trabajo) y otros para ganar el sustento diario que la peluquería tan generosa provee.
Cual es el fantasma de la política y los que toman las decisiones para impedir que una peluquería abra sus puertas y que otras tiendas con riesgos de más contactos físicos y sin la distancia social están hace tiempo funcionando, será la falta de Lobby sobre negociaciones mas concretas de sus dirigentes o que la voz cantante de algunos mediáticos hacen poco creíbles a la industria.
El 54% (los que están en Buenos Aires) de los salones de peluquería tendrán que seguir esperando su apertura, aunque ya varios de ellos a puertas cerradas y algunos mas osados con sus persianas abiertas atienden sus clientes.
Estadísticas, escenarios posibles, dirigentes, mutuales políticas, profesionales y amateur todos están con diferentes comunicaciones y lamentablemente siempre detrás de los acontecimientos.
Rodolfo Urrea